
Ante la escasez de lluvias y decenas de focos de incendio detectados a diario, el Gobierno decidió prohibir las quemas en todo el territorio provincial, aun las que han sido autorizadas con anterioridad.
Este viernes por la mañana se realizó una conferencia de prensa a cargo de Defensa Civil para explicar detalles de la medida, que tiene por objetivo proteger a la población, la flora y fauna y evitar daños materiales.
“En los últimos meses llovió muy poco, en algunas localidades solo un milímetro en 30 días, lo que genera un déficit de agua y potencia la probabilidad de incendios”, declaró el director de Defensa Civil en el SUM del Ministerio de Coordinación, lugar de la conferencia.
Según informó el subdirector de Defensa Civil, Bruno Lovinson, actualmente hay un promedio 70 incendios rurales diarios. Por lo que se toma la decisión de prohibir las quemas, además de instar a la población “para que prepare los sistemas de prevención, de cortafuegos, limpien la pastura y otras medidas que, en caso de incendio, puedan sofocarlo rápidamente”.
De esos incendios, solamente el 2% se da de manera accidental, el resto se originan intencionalmente, generalmente para la eliminación de pasturas. “Se prende el fuego, la gente no controla y termina provocando daños a alambrados y propiedades”.
A pesar de lo anterior, Lovinson remarca que las campañas de concientización llevadas adelante lograron logró bajar notablemente el número de focos en el último tiempo, con personas que se equiparon y capacitaron al respecto, pero que “todavía existe una falta de cultura respecto al manejo del fuego que hay que trabajar”.
Las zonas más afectadas son la zona del Río Uruguay y el centro-norte provincial.